viernes, 4 de septiembre de 2009

el primer día atravesamos el estrecho de bering bajo condiciones climáticas extremas, pero fue rápido. a mitad de camino nos cruzamos con unos rebeldes chechenos que venían de bombardear la central hidroeléctrica sayano-shúshenskaya y estaban nerviosos. llegamos de tarde a krondstat.



el segundo día encontramos fácilmente un buen sitio para desayunar y luego comimos en los astilleros, sopa, bacalhau y trozos de fruta. por la noche echaban por televisión al benfica, con ese aire de aristócrata decadente que me hace hincha. javi garcía no sabe manejar el rombo pero ramires, de cabeza, salvó los muebles.



día 3: pretendimos llegar a nazaret de un sólo fogonazo pero pronto comprendimos que, si los océanos son grandes, a los continentes les va llegando. hacia el mar, mucho calor, y al llegar a la playa de brighton decidimos hacer noche cuando cayó la niebla.



4: algún síntoma de escorbuto pero llegamos a nazaret: miles de fieles amontonados por todos los sitios, así que entramos, dimos dos vueltas, y salimos. la leyenda que de verdad navegaba en mi tremenda cabeza era la del testarazo del negro ramires, y llegamos al poblado que rodea el "estadio de la luz" ya de noche.



quinto día- buscando a ramires desde el mediodía a la noche, nada de nada.



6-el viaje de vuelta fue espléndido, reparamos el cassete con la navaja del ejército suizo, cinco años de garantía, y los discos sonaban mejor, y era como garrincha regateando al benfica entero, un estadio de gran luz.

1 comentario:

Victor dijo...

Imaginación al poder...
Otro gran cuaderno de Bitácora.
Saludos.